Condenado.
Escenario: progresa cada vez que juegues un Cultista de oro.
Prólogo: genera Iniciado del Eclipse Eterno en esta fila.
Capítulo 1: imbuye a todos tus cultistas no desleales del campo de batalla, de tu mano y de tu mazo con «Cada vez que juegues un cultista, otorga 1 de potencia y después aumenta en 1 este valor si era de bronce».
Capítulo 2: genera y juega Diácono del Eclipse Eterno.
Despliegue: imbuye a una unidad de tu mano con la categoría Cultista.
Orden: imbuye a una unidad de tu mazo con la categoría Cultista.
Orden: imbuye a una unidad enemiga de bronce con «Cada vez que tu rival juegue un Cultista, se inflige 1 de daño. Agonía: genera una copia base de sí misma en la fila opuesta, la imbuye con la categoría Cultista y luego establece su poder en el número de cultistas que controle tu rival».
Condenado: estado que elimina la carta del juego después de abandonar el campo de batalla.
Genera: agrega una carta a la partida.
Imbuida: estado que agrega efectos o categorías a una carta. Al eliminar el estado, también se eliminan todos los efectos y categorías agregados. El bloqueo desactiva las habilidades imbuidas.
Desleal: esta carta se juega en el lado contrario del campo de batalla y después obtiene Espía.
Para los no iniciados, el Gran Plan se manifestará como una avalancha: una serie de sucesos, en apariencia insignificantes, que sacudirán toda la ladera de la montaña para borrar el antiguo régimen del mapa. Solo los dementes y los historiadores concienzudos, que estudiarán en retrospectiva el desarrollo de los acontecimientos de esta época varias décadas después, descubrirán la verdad: que era un mecanismo preciso como reloj, cuya cuenta regresiva apuntaba hacia el advenimiento de un nuevo orden mundial.